Plataforma UniNomade Latinoamericana
(UniNomade - LA)
Nos encontramos ante un cambio de época dada por la transformación
radical del capitalismo, de sus modos de producción y de explotación. La financiarización
del capitalismo es la contracara de la gran mutación del trabajo, inducida por
el capital, ante su dificultad para mantener la marcha normal de la explotación
del trabajo fabril y del control sobre la fuerza de trabajo. Transitamos una
crisis que no es el mero resultado de desequilibrios o inestabilidades
del capitalismo financiero que impactan a
sectores industriales, conocidos como de
la economía real. No hay lugar para
la distinción entre un capitalismo industrial bueno y un capitalismo financiero
parasitario. Esta perspectiva nos aleja de las lectura que han ensayado las distintas
izquierdas sobre la crisis; ya sean aquellas que se muestran visceralmente
anticapitalistas, aunque no menos estériles o aquellas que reclaman el retorno a las
políticas estatales keynesiano- fordistas.
Al entender estos cambios en términos de la
actualidad de un nuevo capitalismo de tipo
cognitivo no negamos la
importancia de la producción y el trabajo industrial a nivel global, incluso en
nuestros propios territorios latinoamericanos. Sin embargo, reconocemos la
tendencial hegemonía de un tipo de producción y de trabajo, afectivo,
comunicacional, inmaterial, en red, asentado en la cooperación social, base del
nuevo proceso de valorización y acumulación que es diferente al industrial. Nos
hallamos ante nuevas condiciones de explotación y de captura de la
productividad de potencias abstractas y comunes, del saber y del propio bios. Lo que se ha definido como la
producción antropogenética, producción del hombre por el hombre.
Cuando el saber se convierte en mercancía, en fuerza
productiva, entonces la crítica del saber deviene crítica de la economía
política.
El
capitalismo de nuevo tipo que transitamos exige modificar el estatuto de los
saberes y, simultáneamente, repensar la relación entre la producción del
conocimiento (no sólo técnico), devenido ahora fuerza productiva, con los clásicos
lugares institucionales, ya sean éstos académicos o políticos, que mantienen aún
el monopolio de la producción del conocimiento. En el espacio de producción
metropolitana, cuando las universidades se convierten en áreas esenciales de
producción, resulta inútil y superfluo politizar los espacios académicos con las formas tradicionales de hacerlo. Si el terreno del
saber se manifiesta ahora como espacio de confrontación de la lucha de clases,
no será posible aceptar predominios en la producción de teorías, ni intelectuales orgánicos que monopolicen
la batalla de las ideas.
El espíritu de nuestra
aventura se asienta en el nuevo rol asumido por el saber en la producción y cooperación
social así como en las transformaciones que han alcanzado a la universidad y
las prácticas políticas de los movimientos.
En tiempos de transición no
resulta fácil alcanzar soluciones creativas e ingeniosas; nos vemos obligados a
experimentar a la sombra de las últimas luchas biopolíticas. Es urgente e ineludible
lograr soluciones novedosas e inéditas; nuevos lugares e instituciones donde
experimentar relaciones originales entre producción de conocimientos, prácticas
políticas y desarrollos de luchas como verdadera aventura de la inteligencia
colectiva.
UniNómade-LA
es un intento más en este sentido que se suma a las experiencias en curso de
las UniNómadas de Italia, Brasil y España. Aspiramos alcanzar una recomposición
de la inteligencia crítica en torno al deseo común de construir dispositivos de
autoformación y de debate público para discutir conceptos, lenguajes y categorías
que la experiencia teórica y práctica de los movimientos han expresado en estos
últimos años. Participando e impulsando la realización de seminarios,
laboratorios y encuentros con los centenares de activistas del movimiento, no
como sujetos «a formar » sino como protagonistas de pleno derecho. En la búsqueda
y concreción de la fusión de teoría y práctica como elemento fundacional de
concepciones y categorías que permitan alumbrar nuevos caminos.
No partimos de fórmulas vacías; nuestro punto de
partida teórico y político se nutre de la tradición del obrerismo italiano en
su versión moderna del nuevo siglo, paradigmas conceptos y certezas que han
orientado este pensamiento crítico en los últimos años. Y de las experiencias
alcanzadas por las UniNomadas que nos preceden, respetando las especificidades
de cada territorio de lucha y confrontación. El pensamiento en este sentido
está situado. ¿Cómo transformar las infinidades de experiencias en dispositivos
productivos de conocimiento y saber? Se trata de dar vida a una Universidad
Nómade capaz de contaminar a las universidades oficiales así como de los
territorios y lugares de conflictos.
La apuesta es recrear
al interior de los movimientos laboratorios de análisis críticos, suerte de
universidades libres a través de ciclos de seminarios autogestionados, itinerantes, instalados como circulación del
saber crítico que vaya más allá de los tradicionales lugares, académicos y
políticos, de producción y transmisión del conocimiento. Se trata de investigadores, docentes, estudiantes y
activistas que den vida a una universidad libre. Nos surge una primera
pregunta: ¿es necesario fomentar esta nueva perspectiva y organizar un núcleo
de formación? O, ¿se trata de un recurso frente al impasse de eficacia política de los
movimientos? Nos anima en ese sentido una certeza: la necesidad de sacudir,
tras una práctica teórica y política, la limitada carencia de compromiso y
autocomplaciente autosuficiencia cultural que caracteriza al movimiento de
movimientos e ir definiendo en el devenir de estos acontecimientos un derrotero
de la Autonomía como práctica política, como una maquina política que sea capaz
de enfrentarse, frontalmente, en todos los ámbitos, a las biopolíticas codificadas
por el capital desde el COMUN.
